Estaba volando, como de costumbre, en plena noche, rodeando la luna desde el cielo, apoyandome en la niebla del cielo. Bajé abajo, alguien necesitaba apoyo.. cuando bajé oí un rotundo silencio.. poco despues oí...
-Le tenemos! atrapadlo
Miré hacia los lados, me cogieron entre todos, yo intenté escaparme.. pero eran demasiados, me pusieron una bolsa negra en la cabeza y me golearon.. perdí el conocimiento. Me metieron en una furgoneta negra y me llevaron a una especie de búnker donde solamente habia una salida, vigilada por muchos soldados.
Me metieron en una sala, atándome en una silla, me quitaron la bolsa de la cabeza y me pusieron una especie de "colonia" en la nariz para que despertase. Miré hacia los lados, completamente desconcertado, desorientado pero sin miedo.. Al frente mio habia una mesa de acero, y al oro extremo, un hombre con la cara tapada y la voz disorsionada, sentado, mirandome fijamente a los ojos, con las manos puestas en la mesa.
-De modo que eres tu el angel que todo el mundo habla, el que busca el bien y la justicia a todos!- me dijo con aquella voz tan incómoda.
- Yo ya no hago eso.. lo único que quiero es llegar al fin de mis dias y regresar de donde vengo..- le dije mirando fijamente al suelo..
- Mmm.. Ya, pues siento informarte que ya no será asi, nos serás de muchissima utilidad, Y harás todo lo que nosotros te pidamos. Llevaoslo!.
Me cogieron dos hombres altos, vestidos de militar, me llevaron a otra sala donde habia una camilla, me pusieron bocaabajo, me ataron muy fuerte. Me cogieron las alas y me las arrancaron de mi cuerpo.. Me cosieron la espalda, procurando que no me desangrase en aquel momento. De tal dolor que pasé, perdí las fuerzas al momento, no podia levantarme, de modo que me desataron y me llevaron a una celda, me esamparon contra la pared y me pusieron un collar de rastreo. Por si me escapaba.. Me dieron una ropa y me dijeron.
-Bienvenido al infierno, maldito angel, ahora sabrás lo que es sufrir....
Continuará..
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